Ken

Hoy vamos a terminar la casa de juguetes rotos, hoy le toca el turno al hombre sin coco, a ese que va de petado con sus musculitos, mientras yo lo peto con este blog tan curradito.

Hoy le toca pasar por caja al chulito del Ken, el que compra calzoncillos falsos de Calvin Klein, ese que se gana sus músculos a base de pinchazos, porque se le ve de lejos que no ha pisado en su vida un gimnasio.

Un personaje con el tuenti lleno de fotos semidesnudo frente al espejo, bonito recuerdo para sus nietos cuando sea viejo, no tiene formación porque eso ya no se lleva, ahora la formación de moda es la universidad callejera.

Trata a las mujeres con poca delicadeza, tiene poco corazón y menos neuronas en la cabeza, de las mujeres no comprende sus sentimientos, es demasiada información para su entendimiento, si escucha hablar a su novia de un retraso menstrual no se asusta, el esta acostumbrado a que el medico le hable de su retraso mental en la consulta.

Va por la vida con unas Armani de imitación, y si pasa su coche sin duda escucharas su canción, conduce 20000 vatios pegados a una carrocería, va de entendido pero solo dice tonterías, opina de política, de fútbol y hasta de las sentencias de los jueces, pero cuando termina de hablar solo ha dicho gilipolleces.

Es el hombre ideal, se mide con sus competidores por la dureza abdominal, cultiva su intelecto y una vez intento leer un libro, pero dice que sin dibujos es muy aburrido, no tiene muchas habilidades pero le sobra simpleza, por eso a veces hace puzzles de dos piezas.

En el fondo lleva una vida llena de complejos, por eso le dedica tanto tiempo al espejo, se peina a la moda y lleva las cejas depiladas, aunque en el fondo de mujeres no sabe nada, el no sale a ligar, sale de cacería, generalmente cae en su trampa alguna Barbie perdida.

Notaras si entra en una discoteca, es aquel al que le retumba la música en su cabeza hueca, es arrítmico completamente, ese que cuando baila, por vergüenza se aparta toda la gente, es una mezcla entre Carton y Locomía, como cuando cortas una lombriz y se mueve de agonía.

Va de Don Juan y de ligón pero es un pagafantas, lo niega pero nadie le cree después de mirarle las tetas a tantas, cree que un nuevo “rey de las nenas” ha nacido, pero en realidad solo es un triste creído.

Luce bien su cuerpo si se pasea por la playa, generalmente cuando es mas guapo es cuando cierra la boca y calla, se compra una talla menos para ir bien ajustadito, pero cuando mejor esta, sigue siendo calladito.

El problema viene cuando se quita la ropa y se desnuda, el Ken lo que tiene entre las piernas no tiene cura, provoca la risa de todas sus amantes, y de todos sus complejos ese es el más importante, en el gimnasio puede coger mucho peso, pero en la cama haber que coño hace con eso. Por eso la NENA me ayuda con esto que os cuento, no se puede tolerar que entre las piernas tenga tan poco argumento.

Que se puede esperar de un muñeco, mucho plástico duro pero al final está hueco, es carne de hombre, mujeres y viceversa, el típico tío por el que no merece la pena comerse la cabeza.

Por suerte para este tipo de hombre sigue existiendo una excepción, aunque últimamente estemos en peligro de extinción, a muchos nos gusta vuestra complejidad, y hacemos de nuestro interior una maquina que os pueda descifrar, nos encanta vuestra imperfección y que a pesar de ello hagáis dos cosas a la vez, pero cuando más nos gustáis es cuando os dejáis querer. No temáis si os cruzáis con un Ken en vuestro camino, simplemente pasad con él el rato, pensad que vuestro príncipe aun os busca con vuestro zapato.