Playa

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27 de noviembre de 2011

Oficio de Héroes

Hace años que me ronda un sentimiento, y días que lo hace una idea, he encontrado aquel principio que para el ser humano sigue siendo una odisea, he encontrado algo más indescriptible que el amor o la felicidad, el honor aun no tiene una definición que lo pueda explicar.

Suele ser oficio de buenos hombres, aunque hay más de un villano que ante él también responde, es una responsabilidad, un principio y probablemente una conducta vital, es tanto como la humildad con la que lo quiero expresar.

Tiene su razón de ser en los tiempos difíciles, de ahí que se le tache a quien lo posee de invencible, es una virtud contraria a la cobardía y a la debilidad, se trata de dar el primer paso ante el problema que nadie se atreve a enfrentar. Es la capacidad de pensar en uno mismo y en los demás, en que tu egoísmo no supere el de la sociedad, es una cualidad que está por encima del bien y del mal, de lo correcto o incorrecto, de lo imprevisible y de lo que se puede esperar, es algo tan único como la medalla que nunca te podrás colgar, es la recompensa que nunca será publica, es la satisfacción de poseer una alma única.

Es algo para lo que la sociedad no esta preparada, el hombre honorable será criticado por mover el mundo mientras nadie hace nada, el honor es tan intimo y secreto como quien lo ejerce, muchas veces será beneficiario del mismo quien no lo merece, pero probablemente esa sea la clave de su importancia, ser inmune a la maldad cuando esta en su apogeo se contagia.

En esta sociedad positiva el honor es defendido en los tribunales, en otras civilizaciones más primitivas se defendía en duelos de espadas y puñales, pero un hombre honorable está por encima de todo eso, el honor no está en la publicidad ni el la gloria, probablemente del hombre más honorable nunca se cuente su historia, el honor solo conlleva la satisfacción que alcanza el alma, cuando mientras todos temen la pregunta, tú guardas la respuesta con calma.

El honor es intangible, e incluso dudosamente defendible, es la falacia de ignorantes sin criterio, es la integridad de aquel que lucha y mantiene su propio imperio, es la personalidad del soldado que le da de comer a su enemigo, la amistad de aquel que defiende a muerte a su mejor amigo, es la fuerza en los tiempos difíciles, es la credibilidad en tiempos increíbles, es la verdad y la mentira que no hiere, es abandonar el amor cuando se vuelva más importante que él mismo, la persona a la que quieres, es sacrificar lejos de nuestros intereses, es luchar, amar, morir y vivir por todo lo que de verdad lo merece.

Es un merito, un principio, un valor, un sentimiento, es un sacrificio por todo lo que merezca la pena, sin reconocimientos, monumentos, ni titulares en la prensa, un corazón honorable es la mejor de las recompensas, es valentía, arrojo, pasión y entrega, es hacer creíble lo que nadie crea, es cruzar el limite de lo imposible, de todo aquello que para el resto es increíble.

Es algo que escapa a nuestra mente pero que captura nuestra alma, es parte de lo que eres, el oficio de aquellos que son más que héroes, es la razón por la que a diario se salvan vidas, la razón por la que el bien ha de mantener su supremacía, es la fuerza que mueve a los hombres que encuentran su futuro sin pisar a nadie, será la nota de corte cuando dejemos de ser mortales, porque seamos buenos o malos para nuestros tribunales, lo único que hará que nuestra alma viva para siempre, será que hayamos sido hombres honorables.

Invisible


Me levanto, me lavo la cara y busco en el espejo mi rostro, y una vez más al no verme caigo y me desplomo, vuelvo a salir sin piel a la calle, siendo un hombre invisible aunque pueda verme alguien, nos cruzamos en el ascensor como si nada, llamas a tu planta, pero a mi me ignoras, sin saber si en mi vida subes o bajas.
Sales dejando la estancia inundada con tu esencia, y en un impulso por sobrevivir respiro tu perfume llenándome de paciencia.
Acaba la jornada formal y ni siquiera me has visto, a veces pienso que quien roba tus mirada debes ser además de afortunado, muy listo, porque yo que me considero alguien inteligente, veo a diario como para ti me vuelvo un ser indiferente, me frustra y como buen luchador sigo adelante, aunque no sabes lo que daría por que la palabra “nuestro” encontrase su instante.
Pasan las horas y mi cabeza no deja de pensar el motivo, de que yo te piense a todas horas, y tú no lo hagas ni un solo segundo conmigo, me pregunto, hasta que de bruces me doy con la respuesta, encuentro el motivo en ese joven que en la parada del autobús te besa, y miro con ojo despechado y cierta envidia, a ese chaval con el que compartes tu vida, pero lejos de ser subjetivo me doy cuenta de que no tengo nada que envidiar, y de nuevo me inunda esa pregunta que no me puedo explicar, que motivo es ese que hace que me ignores, puedo entender que te comprometas aunque por ello llores, puedo entender que lo quieras, aunque a veces te supere el deseo y más que a mi lo ignores, pero no me puedo explicar que me arrojes al rincón de tu ignorancia, ¿acaso no soy el mismo que cuando estás triste intenta hacerte gracia?, ¿acaso no nos hemos escondido juntos tras los coches?, para cuchichear sobre eso que llaman amor cuando compartíamos alguna tarde o noche, ¿acaso no soy yo quien valora cada uno de tus abrazos?, ese que cuando necesitas que alguien te escuche es el primero en hacerte caso, dime preciosa que no te he mostrado algo precioso cantando en directo, dime que no mereció la pena que compartiésemos aquel concierto.
Pero te entiendo, quizás porque te siento cerca, porque esa conformidad no hay momento en el día en el que la comprenda, pero acepto que no todo el mundo está preparado para darlo todo en el camino, conozco mucha gente que se deja arrastrar por la corriente en busca del prometido destino, y por eso ni te culpo ni te guardo rencor, solo te diré que como el mío no has sentido otro calor.
Y a pesar de mis palabras, todo sigue y todo marcha, unos se besan y se juran amor eterno por vigésima tercera vez y otros viven esperando ese amor que les vuelva hacer creer, sin conformarse, soportando la cruda soledad, supongo que por eso tantas parejas se hunden en la conformidad.
Por eso después de un tiempo descubrí cual era el problema de que no me veas, no soy yo el que soy invisible, es tu venda la única culpable de tu ceguera, aunque no te culpo por vivir en un mundo oscuro, uno no sabe quitarse la venda hasta que es suficientemente maduro, y si algo tiene ese que hoy te besa, es que tiene mucho miedo en el corazón y pocos recursos en la cabeza, de ahí que en cuanto me acerco a ti, enseñe los dientes como una hiena hambrienta.
Así aquí seguiré ignorado, viendo como malgastas la única vida que tienes con el miedoso que tienes a tu lado, sabiendo que todo lo que yo viví, es más de lo que tú tendrás habiéndote conformado.

3 de noviembre de 2011

Ángeles o Demonios

No hay dios ni diablo, ni nuestras vidas son su oficio, no existe otro culpable más que tú y yo de nuestra perdida o beneficio, no hay arma blanca que mate sin asesino que la empuñe, como nunca hubo valentía en aquel que huye.

No hay dirección, camino o guía, más que la que andamos con tristeza o alegría, somos dueños de nuestros actos aunque a veces pretendamos lo contrario, somos tan culpables de nuestra derrota, como lo es de su victoria nuestro adversario.

Somos ángeles y demonios, recipientes llenos de emociones que alteran nuestro entorno, somos felicidad, alegría, amor, dolor u odio, capaces de matar como un asesino, o amar mucho más que cualquier novio. En nuestro interior cabe la tristeza más oscura, o la felicidad y su luz más pura, caben las emociones que nos destierran en un abismo, o aquellas llenas de superación que nos llenan de heroísmo, somos inocentes y culpables, todos tenemos pasado y la oportunidad de un futuro maleable.

Está en tu mano elegir la fuerza o el lado oscuro, seguir la corriente o ser el luchador más duro, superarte o obtener el mismo resultado, ser consecuente o seguir echándole las culpas al que tienes al lado, ser hombre o un simple ser caprichoso, coger lo que te pertenece, o esperar a que te lo traiga el destino en un momento dichoso.

Presta atención a la lucha que existe en tu interior entre tus demonios y tus ángeles, porque tarde o temprano tendrás que tomar parte, presta atención a todo lo que te rodea, y plantéate si realmente ese es el mundo que anhelas, deja de mirar para otro lado, la única manera de ser feliz es luchar por lo soñado, vence a tus miedos, perdona tus pecados, ama a quien tengas a tu lado y siembra tu futuro con las semillas de tu pasado, saca lo mejor de ti y no dejes que te juzguen, recuerda que tú eres el valiente y ellos los que huyen.

Y ten claro que en le vida encontrarás dragones y mazmorras allí donde vayas, pero cuando se pretende llegar a la cima, es una montaña lo que se escala, la vida será dura aunque merecerá la pena, habrás de enseñar los dientes cuando amenacen lo que te recorre las venas, hallaras ira y derrota, pero caminaras con amor y victorias en los momentos en los que tu vida parecerá más loca.

Recuerda que nuestro final es inevitable, ya seas inocente o culpable, un día habrás de descansar para siempre, y como todos habrás tenido la oportunidad de elegir cómo sostenerte, si lo haces con la alas de un ángel o apoyado sobre un tridente.

Por eso al igual que el árbol perenne se viste de hojas todo el año, mientras que el caduco termina solo y desnudo en otoño, tu en la vida tienes la oportunidad de elegir se libre y feliz como un ángel, o preso en el infierno de la frustración como un demonio.