Yo escribo

Solo, un estado y un sentimiento, una realidad invencible al maquillaje, inmune a mi mejor argumento, una emoción necesitada de impaciencia por que acabe, unos pasos que caminan porque hay suelo, un corazón que aun no se atreve a bajar de tu cielo, bipolaridad entre córtex y límbico, una fe basada en la esperanza que supera cualquier pasaje bíblico, mi media mitad, mi búsqueda finalizada, la ficha que me puede completar, ese momento en el que da gusto estirar las alas.
Complejidad, emociones, química y sentimientos, nada parecido a las palabras que uso en este momento, frialdad incalculable, visión inalcanzable, deseo desesperado, ejercicio de madurez finalizado, negación, aceptación y tres estados más, por lo tanto duelo, olvido impuesto sin venda ni velo, castigo de cupido, fuente de celos.
Cúmulo de experiencia, exhausta paciencia, dulce rostro, amarga verdad, todo es poco y nada en realidad, tristeza y dudas, llamadas mudas, miradas ciegas, se va la razón y la esperanza espera, nada explica todo lo que sucede, el tiempo, único valiente que a esto le hace frente, rutina y cobijo en lo cotidiano, sentir la caída sin que nadie coja la mano, millones de palabras, intentos de expresión, explicaciones desesperadas, suicidios de desesperación.
Labios muertos, deseos sin ilusión, besos secos, consuelo sin compasión, lagrimas de mercurio, sangre de acero fundido, nada procuro, porque nada es contigo, nudo en la garganta, canciones de victorias, ni el calor de una manta, ni laureles, ni glorias, caída sin final, vuelta a empezar, sentimientos sin olvidos, porque no esta permitido olvidar, gran compañía de amigos, nada más por esperar.
Perspectiva ciega, acciones al contrario, la vida de nuevo llega, tu noticia es fría como un telediario, tu belleza presente y en tu presencia mi tristeza ausente, tu mirada entre tanta gente, siempre serás alguien diferente.
Ni derechos de autor sobre tu sonrisa, ni te vuelves guionista de la mía, no seré escultor de tus curvas, aunque como escritor hayas sido mi mejor musa, no seré esclavo de tu cuerpo, ni de tu mejor placer el maestro, no seré aprendiz de tu noviazgo, ni haré que te vistas de largo, no serás mi compañía, ni conocerás los secretos de mi vida.
De tu existencia no conoceré, ni en tu vida encontrare mi lugar, y si después de todo esto eres feliz, te prometo que algún día seré felicidad.

Engañando a la esperanza

Aprenderé a aceptar que en esta vida no estarás conmigo, que hay cosas inalcanzables a pesar de lo sentido, aceptaré que tu frialdad es tan grande como mi cariño, y aprenderé a andar sin ti como lo hacen los niños.
Aprenderé a no sufrir cuando un amigo te nombre, y aceptaré que no vendrás aunque en silencio te llame todas las noches, aceptaré que aquí he de pararme aunque valgas la pena, aceptaré que no es el mismo cariño el que recorre nuestras venas, supongo que no es suficientemente valiosa mi ilusión, aunque ni siquiera me atreva a ponerle precio a tu corazón.
Aprenderé a estar contigo y controlar mis emociones, intentaré no encoger el corazón de esta manera cuando escucho tus canciones, aprenderé a guardar todos los besos que cada día mueren en mis labios, aprenderé a pensar en otra cosa que no seas tú a diario.
Pero antes de irme quiero que sepas, que se me escapa la voz, como de aquella canción decía su letra, y que hoy tararea mi corazón, entiende que me voy con tu sonrisa en mi rostro, y con el corazón cargado de sentimientos aunque te parezcan pocos, me voy con las lagrimas de tristeza que robe de tus ojos, porque quiero verte feliz aunque me mate que algún día sea con otro.
Me voy adorando de ti hasta el último defecto, a pesar de que son pocos y te hacen inmensamente bonita, sabiendo que sentirte así hace los días perfectos, pero que alejarse de estos suspiros es lo que mi alma necesita, me voy dejando sin dudas a la mujer que ha tumbado mis esquemas, sabiendo que muero por tu madurez y que irme así es lo que más me quema, me voy sabiendo que me quedan 19 días y 500 noches como a Sabina, y que durante mucho tiempo serás aunque no lo entiendas la mujer de mi vida, la que ha sabido despertar los sentimientos más maduros y profundos, esa mujer por la que la gente cuenta que moverían el mundo.
Me voy pero me quedo, me quedo con las ganas de darte mi ultimo abrazo, me quedo con las ganas de robarte un beso aunque no me hagas caso, me quedo con las ganas de hacerte el amor como solo se hace cuando uno vive por la otra persona, me quedo con las ganas de probar tu cariño que debe ser lo más cercano a la gloria, me voy pero no a mucha distancia, porque por si no lo recuerdas más de una vez he muerto por tu espalda al oler tu fragancia, me voy pero sigo tan cerca como siempre, porque se van mi sentimientos pero yo fingiendo que no te quiero estaré presente.
Me voy sabiendo que esperar algo de ti no es mi derecho, pero antes de irme quiero que sepas que no me arrepiento de nada de lo que he hecho, de hecho ahí te quedas; madura, especial y para mi corazón infinitamente bonita, mientras que yo me voy con las manos tapándome la boca y sintiendo como mi corazón te grita.

Un pañuelo blanco

Cuando esperarte se vuelve soledad, cuando los sentimiento lejos de calentarme destacan tu frialdad, cuando tu conquista se convierte en una forma de vida, cuando por buscar la entrada a tu mundo pierdo de vista mis salidas, cuando derramo más de lo que contengo, cuando por mirar dónde vas se me olvida de donde vengo, cuando estar cerca ya no me trae tus abrazos, cuando aumenta mi atención mientras cada vez me haces menos caso, cuando para mi es cerca y para ti es lejos, cuando cruzo la línea porque ya te quiero.
Tarde o temprano se llega a ese dónde o a ese cuándo, y reconozco que cada vez más, parece que esto es en vano, estás ahí preciosa y completa como siempre, sin ninguna duda encuentras en mí a ese hombre que te adora sonriente, pero será la experiencia o que mi corazón está compuesto de pasados pedazos, que antes de herirme o perder el tiempo prefiero cortar mis lazos, esos que me unen a ti y que ya no se muy bien cuales son sus significados, porque mientras más me acerco a ti, creo que más me alejo de estar a tu lado.
Retrocedo y para colmo no me quedo solo, tengo algo que gusta aunque tú no lo veas del todo, dejo de buscar tu mano y siento como alguien encuentra la mía, y a pesar de que me duela sé que te estoy dando por perdida.
Hasta aquí llegó lo que tenía que hacer, me paro y te guardo en el cajoncito de quien quise querer, y aunque me gustaría que fuese diferente, ya esta bien de perder, vuelven a tocar tiempos regulares, donde se apaga la poesía y los cantos de juglares, vuelve el estudio y la constancia, que traducido al idioma que te hablo significa distancia, esa que tú apenas notas pero que a mi me duele, por eso aprendí a diferenciar el que quiere amar del que puede.
Supongo que será volver a verte, y volverá el deseo impetuoso de quererte, pero también se que en mi esencia sabré guardarte y protegerme de eso que tú tienes, no te guardo rencor, ni dejo esto como un simple adiós, prefiero despedirme con el dulce sabor de la esperanza, por si algún día nos volvemos a cruzar los dos sobrados de ganas. Te dejo todo mi cariño y fuerza para cuando te haga falta o simplemente porque la merezcas, porque esta claro que has paseado por las partes más bonitas de mi corazón y mi cabeza.
Por eso vida, cuando nos volvamos a cruzar como dos buenos amigos, tú finge que no te diste cuenta, que yo fingiré que no te he querido.

Volví a aprender lo necesario

Porque de ti volví a aprender lo necesario, porque has traído a mí eso que hace que cada día sea un regalo, has despertado en mi estos sentimientos que por sentirlos me llenan de miedo, pero que me hacen inmensamente feliz aunque me calle algún que otro te quiero, vuelve a mi esa ilusión que no la provoca cualquiera, vuelve a mi esa sonrisa al verte cuando llegas.

Te has convertido en la mujer favorita de mis ojos, tanto que yo que me las doy de sensato ando por ti medio loco, te has convertido en el pensamiento que más repito cada día, tanto que tu sonrisa ya es parte de mi alegría.

Has provocado los sentimientos más maduros y sinceros que he sentido nunca, porque eres una mujer de los pies a la cabeza sin ninguna duda, porque eres preciosa, cariñosa y amable, porque de mi mejor sonrisa eres la culpable, porque eres dulce, guapa y atractiva, y como comprenderás derrotas mi corazón cuando me miras, porque se me nota aunque no te des cuenta, porque esto lejos de desaparecer cada día aumenta, porque ya tu rostro me trae la felicidad, porque lo único que me falta es esa parte en la que te puedo amar.

Porque te he soñado ya muchas veces cogiéndome de la mano, porque he pensado más de una vez en acariciarnos hasta desgastarnos, porque se me sale el cariño por cada parte de mi cuerpo, porque has resucitado en mi algo que ya creía muerto, porque adoro tu sonrisa y cada uno de tus defectos, porque aun recuerdo el chaleco que ayer llevabas puesto, porque no me canso de adorarte, porque me muero por besarte, porque eres más que guapa, porque eres bonita, porque tu amor se me escapa, y es lo único que este hombre necesita.

Por eso me voy a la cama a altas horas de la madrugada, sabiendo que todo esto me seguirá haciendo feliz mañana, sabiendo que te pensaré cada media hora, o quizás mucho más de lo que lo hago ahora, y aunque mañana le siga dando vueltas, y viviendo de esta esperanza que es lo único que me queda, ahora mismo casi no me importa que no me quieras, o que no me veas con los mismos ojos, no me importa que no me veas, o que para ti no sea más que un estorbo, has hecho nacer sentimientos enormemente bonitos en mi, y de momento con eso me conformo, y a pesar de que te puedo jurar sin que me tiemble la mano, que tu frialdad me esta matando, también con la mano en el corazón te juro, que ahora mismo mirando tus fotos soy el hombre más feliz del mundo.

Y aunque vengo de la calle del fracaso, y lo más razonable sería abandonar estos sentimientos sin hacerles caso, prefiero un millón de lagrimas y de heridas en tu conquista, que una sola sonrisa falsa mientras parto en la huida, porque mi valentía prefiere verte irte con un no en la boca, que soportar esta frialdad toda una vida como un idiota.