Héroe

Ninguno de nosotros ha vivido una guerra, ni siquiera el que se alista en el ejercito hoy en día, ellos no han sentido en su alma que su vida o la de un amigo se les iba.

Me paro a pensar en los horrores de una batalla, en el sonido que tendrá una bala o en el destrozo de la metralla, en las pesadillas que aun persiguen a un veterano, por ver morir en la trinchera a un amigo, camarada, o hermano.

Se me encoge el corazón solo de pensar en una despedida, la última que tuvo una madre antes de que le devolviesen a su hijo sin vida, en el regreso del soldado que ya nunca fue el mismo, porque el horror de la guerra le enterró su corazón en un oscuro abismo.

En tantos y tantos fallecidos de un bando y del contrario, en tantas batallas que durante años se libraron a diario, en como el mismo miedo se apoderaba de cada soldado, sin importar por quien luchaba o quien disparase del otro lado.

Porque al final todo se resumía en sobrevivir, sobre todo cuando olvidabas por que habías venido a combatir, cuando tu única misión era que no muriese tu compañero, o rezar para que es día no acertase en su objetivo un bombardero.

Que triste sensación ver como se matan entre si tantos hombres, ver campos con cruces blancas llenas de nombres, ver todo el sufrimiento que se soportaba en la batalla, que todos los días que lucharon al final no sirvieron para nada, solo para llenarlos de odios y miedos, por ver la muerte de tantos enemigos y compañeros.

Hambre, frío, sequía, calor y humedad, años de sufrimiento y de soportar toda esa calamidad, para que al final los que no se manchan las manos se cuelguen las medallas, esos que no saben el sonido de una granada cuando estalla, ni como gritan los heridos en medio de una batalla, no saben lo que significa que un adulto antes de morir grite buscando a su madre, a ellos solo le importan que las cifras al final cuadren.

Y un día todo acaba, regresas a casa después de años sin nada, todo el mundo ha vivido su vida, mientras tu dejaste la tuya en alguna playa de Francia perdida, o quizás intentaste dársela a tu amigo mientras moría, le hubieses regalado la tuya para no verlo sufrir de agonía. Sea como sea tu regresas, pero nunca jamás volverás a ser el mismo que se marchó, con mucha suerte podrás ahogar los fantasmas en el alcohol, esos fantasmas que solo se heredan por el dolor, de haber visto en los ojos de un hombre todo lo que abarca el horror.

Recordaras cada pesadilla hasta el día de tu muerte, será tan real como si tu compañero volviese a morir enfrente, notarás como vuelve a resbalar por tus dedos su sangre caliente, te volverás loco y no encontraras nadie que te consuele, solo tu conoces cuan profunda es la herida de la guerra, y cuanto duele.

Puede que para los demás seas un simple soldado, pero para mi eres un HÉROE, tu y todos los que lucharon a tu lado, disteis vuestra vida, lo más valioso que existe en el este mundo, y como recompensa solo obtuvisteis los miedos y horrores más profundos, no importa el bando por el que luchabais, solo que sois héroes que por vosotros y nuestra libertad la vida dabais.

Este es mi pequeño homenaje a todos los que lucharon y regresaron vivos o muertos, a todos los que el océano enterró sus cuerpos, a todos aquellos que murieron en frías heladas, o que perdieron su vida en la orilla de una playa. Sois los héroes de este planeta, luchasteis por nosotros y por eso se os respeta, tenéis algo más que valentía, y es el honor del que por la libertad antepuso su vida, y aunque no estéis en grandes libros ni os nombren por grandes poderes, siempre seréis nuestros HÉROES.