Reptiliana, de sangre fría y piel resbaladiza, se escurre por el suelo aunque siempre alguien la pisa, de colmillos incisivos y ruin veneno, pero quizás su peor defecto sea su ego. Altiva, orgullosa y creída cual diva, pero todo el mundo sabe que es una simple zorra salida, a veces se permite el lujo de mirarte por encima del hombro, sin darse cuenta que vive rodeada de puro escombro.
Aun cree que puede limpiar su imagen, misión imposible con esos vestidos ajustados a esas patas de alambre, se las da de guapa por su forma de medir la belleza, para ella la más guapa es la que más poyas pone tiesas.
Belén Esteban es su ejemplo a seguir de aquí en adelante, curiosamente el mismo vicio hace tiempo que lo comparten, al principio te puede producir cierta tensión sexual, al final unas simples ganas de vomitar, tener algo con ella es hablar de placer, aunque cuando terminas, te das cuenta de que has bajado el nivel.
Las puedes encontrar en rastros y mercadillos, es esa que más que gritar emite aullidos, en Huelva su hábitat natural suelen ser las palmeras, pero si sales de Huelva suele trabajar en una esquina cualquiera. Para ella la palabra puta es un halago, porque comparada con ella una prostituta es una princesa a su lado, ella hace las calles de forma gratuita, ella por echar un polvo hasta te invita.
A veces se confunde con las Barbies si las comparas por el físico, pero la víbora por celos tiene problemas psíquicos, es una infeliz que con su mierda suele salpicar, es mejor apartarse porque no hay detergente que lo pueda limpiar. Ordinaria, verdulera y sin educación, un cerebro ausente sin ninguna formación, suelta veneno en forma de insulto por esa boquita de malcriada, es el ejemplo de la típica choni de barriada.
Por eso sin más, permíteme que te aplauda, tiene merito que una ZORRA como tú, se haya escapado de la jaula.
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